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  • REVIEW: M10® Anorak Patagonia

    REVIEW: M10® Anorak Patagonia

    La mejor tercera capa minimalista para alpinismo y mountain running técnico.

    Ganadora del premio ISPO.

    En entrenamiento invernal testeando la M10 Anorak

    Siguiendo el mantra «Cuanto más sabes, menos necesitas», esta chaqueta alpina minimalista que prioriza el movimiento es el siguiente paso en protección impermeable y transpirable contra las tormentas, y está fabricada sin PFAS añadidos intencionadamente. Fabricada en una fábrica con certificación Fair Trade Certified™.

    Este año me llegó la M10 Anorak de Patagonia, la que estado usando en diferentes proyectos, y el rendimiento ha sido excepcional. En el ascenso al Altar Falso me arrastré con ella por canalones de hielo y roca sin daños e hice varios vivacs sin colchoneta, sin molestias.

    Usando la M10 durante el ascenso invernal en solitario por el dìa al Altar Falso 4.549 m.

    Puedes leer el relato completo aquí: https://chrismadridserrano.com/blog/altar-falso-en-26-horas

    Origen de su nombre:

    M10 hace referencia a la graduación de dificultad en la escalada mixta, es decir, escalada en rutas de roca, hielo y desplomadas. 

    M se refiere a Mixta, al ser una escalada que transcurre entre roca y hielo, para lo que se requiere habilidades y técnicas en ambos terrenos. 

    10 se refiere a la dificultad, dentro de una escala que inicia en el 1 y que hoy en día alcanza hasta el 12. En este caso una ruta de M10 es desplomada y para la que se requieren movimientos de mucha fuerza, generalmente sin descansos entre roca y hielo.

    Historia: 

    El primer modelo de esta chaqueta se lanzó alrededor de 2010 y en ese entonces ya era una chaqueta revolucionaria, luego vinieron nuevas actualizaciones que la hicieron aún mejor. Yo tuve mi primera versión en 2013, la que he usado hasta ahora en muchas escaladas y que aún conservo conmigo. Está llena de parches, los que me traen hermosos recuerdos de infinitas aventuras.

    Mi primera M10 del 2013

    Durante muchos años patagonia dejó de confeccionarla, pero como dicen “lo bueno se hace esperar”. En 2023 luego de años de revisión de detalles, pruebas de campo, mejora en los materiales, patagonia lanza nuevamente al mercado la M10, es así que en 2023 la M10 fue ganadora del premio Ispo, que es un reconocimiento a los productos innovadores, de alto rendimiento y ecológicos. 

    Este 2025 me llegó la M10 Anorak que es la versión más ligera, la que se adapta perfectamente a mis necesidades para el mountain running más técnico. Usualmente uso la Houdini, pero cuando debo colocarme el arnés y las condiciones climáticas se tornan más crudas, aparece la M10 Anorak para hacer el trabajo duro y sucio. 

    Mountain Running en el primer* ascenso al Cerro La Fortuna 4.641 m

    Materiales: H2No® Performance Standard shell: 3 capas. Nailon 100% reciclado.

    Fit: Slim Fit. Yo siempre uso talla S en Patagonia (mido 1,75 cms y peso 60 kilos). Sin embargo al ser Slim Fit esta vez elegí la talla M, de este modo puedo usarla con alguna segunda capa sintética o pluma debajo sin perder movilidad. 

    Peso: 275 gramos (Talla M)

    Lo mejor de esta chaqueta:

    • Su peso, solo 275 gramos, para ser una tercera capa impermeable eso es una pluma. 
    • La libertad de movimientos que te permite hacer, ya que generalmente las terceras capas son rígidas, en este caso la M10 es pura libertad y comodidad para escalar o correr.
    • Resistente a la abrasión. Puedes arrastrarla sin miedo contra la nieve, el hielo y la roca.
    • Su cierre bi direccional permite obtener ventilación cuando más lo necesitas. Este es para mi un punto fundamental, especialmente cuando me muevo rápido en climas fríos, ya que al transpirar requiero más ventilación, por lo que puedo abrir el cierre desde el pecho y al mismo tiempo mantener mi garganta protegida.
    • Un bolsillo con el tamaño perfecto para guardar tus guantes, barritas, teléfono, etc.
    • Ese mismo bolsillo te permite guardar la chaqueta dentro de si misma y con un bucle que puedes mosquetonear y colgar de tu arnés. 
    • El cordón de la cintura no molesta al hacer vivac ya que está estratégicamente puesto pensado en ello.
    • Capucha compatible con casco, tamaño justo sin quitar visibilidad y comodidad en el menton.
    • Hecha en una fábrica certificada por Fair Trade
    • Finalmente lo mejor es que está hecha libre de PFAS. 

    Los PFAS son un grupo de más de 12,000 químicos que repelen el agua y el aceite, utilizados en ropa técnica para impermeabilidad y durabilidad, pero que son conocidos como «químicos eternos» porque persisten en el medio ambiente, siendo altamente nocivos y contaminantes.

    Si quieres saber más de los PFAS y de como patagonia logró este 2025 ser 100% libre de PFC y PFAS en toda la línea de productos, ingresa al siguiente link:

    https://cl.patagonia.com/pages/libre-de-pfc

    Peso de solo 274 gramos en la talla M.
    Medida del bolsillo 22 cms.
    Capucha con la medida perfecta para el casco.
    Guardada en su propio bolsillo y con el bucle para colgar al arnes.
    Cierre bi direccional.
    Reflector RECCO® incorporado.
    El cordón de ajuste de la cintura está estratégicamente instalado de manera de no molestar en las caderas al hacer vivac estando acostado de lado.
    La M10 es un item esencial en mi equipamiento.

    Desde el primer uso, los detalles de esta chaqueta evidencian que cada elemento de su diseño y confección ha sido concebido por escaladores y para escaladores. El sistema de ajuste en la cintura es algo excepcional, un detalle que solo se aprecia plenamente si eres escalador y has tenido experiencias vivaqueando en condiciones incómodas con otras chaquetas.

    El peso, la respirabilidad, la resistencia a la abrasión y los detalles en su diseño y fabricación hacen de la M10 la tercera capa perfecta para el nuevo alpinismo y el mountain running técnico. 

    “Podrías jugar al baloncesto con esta prenda y el dobladillo no se subiría” Kelly Cordes, Patagonia Field-Testing Coordinator and Athlete.

    Encuentrala aquì:

    www.patagonia.cl/products/85880-chaqueta-impermeable-hombre-m10-r-anorak

  • SAFE TRAILS FUN TRAILS

    SAFE TRAILS FUN TRAILS

    Primera versión en el Día de los Cerros 2025. Un día muy especial con la comunidad.


    He pasado tantas horas en solitario escalando o corriendo en la montaña que he tenido mucho tiempo para pensar, especialmente porque nunca voy a la montaña con música.

    He hecho actividades de más de 26 horas continuas en completa soledad, donde he podido hablar conmigo mismo, escucharme, felicitarme cuando he logrado un objetivo o criticarme duramente cuando he fracasado en algún proyecto, pero es así como he podido reflexionar, crear y crecer.

    Foto del partner Nico Gantz en Yerba Loca.

    En uno de esos tantos ascensos es que me puse a pesar en la problemática de los accidentes en la montaña o en áreas naturales. Tratando de comprender porque ocurren y preguntándome cómo es posible que hayan personas que se pierdan en cerros como el Cerro Manquehue, un cerro que está en medio de la ciudad. 

    Foto del partner Felipe Tapia en El Morro Guayacan.

    En nuestra cultura es común que te enseñen a darle la espalda a la montaña, que te digan que es peligrosa y que no te arriesgues. Pero yo no creo en lo absoluto que la montaña quiera hacernos daño, es más, cuando estoy allá arriba soy un punto diminuto y probablemente insignificante, sin embargo me siento parte del entorno, por lo que pensar que la montaña intencionalmente quiere hacerme daño, honestamente me parece ridìculo. Es por eso que no me gusta cuando en artículos o en la literatura se califica a ciertas montañas como “la montaña asesina”, como es el caso del Nanga Parbat, atribuyéndole así la responsabilidad a la montaña y no a nosotros mismos que nos fuimos a meter ahí. 

    En lo personal creo que más peligrosos podemos ser los seres humanos si nos aproximamos a ellas sin preparación, sin respeto y cometiendo acciones temerarias. Sí creo que las montañas son divinidades, entidades vivas, que están en constante movimiento y transformación, por lo que los riesgos sí existen. Pero debemos ser nosotros los responsables de asumir o disminuir esos riesgos.

    Foto del partner Nico Gantz en el cerro La Paloma.

    Siendo Chile un país de montañas, creo que nuestra aproximación a estas debiese ser completamente distinta a la realidad que tenemos hoy. Somos un país privilegiado en ese sentido. Atletas, skiadores, montañistas, corredores y escaladores de todo el mundo vienen a entrenar a nuestras montañas, por lo que enseñar a admirar y respetar nuestra cordillera debiese ser una visión de país.

    Es bajo esa perspectiva que mientras reflexionaba sobre el problema me di cuenta que en vez de profundizar demasiado en culpar o buscar responsables, debía concentrarme en buscar una solución. 

    Y un mundo actual tan polarizado donde la critica, la búsqueda de excusas y culpar a otros se ha hecho costumbre, sentí la motivación a ser parte de la solución. Es por eso que el lema es SAFE TRAILS FUN TRAILS: Seamos parte de la solución. 

    Foto: José Luis González.

    Siempre he sido un soñador, cuando me imagino algo, tengo la capacidad de visualizar una completa película de lo que será aquello que estoy imaginando, puedo ver caras, sonrisas, incluso sentir las texturas y olores de mi ropa, de las flores, del aire y de la tierra. Es algo mágico. Por eso tenía una idea de lo que sería este evento de lanzamiento, pero no imaginé que sería tan especial. 

    Foto: José González.

    La creación de este proyecto y en particular de este evento fue el ejemplo perfecto para demostrar lo importante que son las comunidades, ya que a pesar de que toda la planificación, gestión y desarrollo fue completamente auto-gestionada, porque trabajé solo y con recursos de mi bolsillo, sin mi partner Anja, mis amigos y auspiciadores no lo podría haber logrado.  

    Tenía la idea, ahora había que desarrollarla y lanzarla. Justo cuando estaba en ese proceso de desarrollo me llegó la invitación para ser anfitrión en el Día de los Cerros de la Fundación Cerros Isla. Una organización sin fines de lucro que promueve la transformación de los cerros isla como fuente de capital natural, cultural y social para toda la ciudadanía, y que todos los años organiza esta celebración en torno a los cerros isla. 

    El 2024 yo había participado como anfitrión junto a Patagonia Chile, impartiendo una charla y luego realizando una salida de trail running en Concepción. Fue una experiencia muy reveladora, ya que ahí me di cuenta de la necesidad de las personas de salir, de compartir y de proteger los espacios naturales en torno al deporte, en este caso a través del trail running, pero que muchas veces no saben como comenzar.

    Así que una vez que me llegó la invitación para ser anfitrión en la versión de este año 2025, se me prendió la ampolleta y pensé en que sería muy buena idea lanzar mi iniciativa en esta celebración ya que calzaba justamente con la visión y la misión del Día de los Cerros. 

    Me inscribí como anfitrión y comencé a trabajar para que resultara perfecto. Le presente la idea a mis auspiciadores quienes con mucho entusiasmo se sumaron con todo. Patagonia, Garmin, La Sportiva, Sea To Summit y Carpas Tribu estaban arriba !.

    Tenía la idea, ahora había que pensar en el lugar, y para mí no había duda de que tenía que ser en el Parque Yerba Loca, ya que es un lugar muy especial para mí, donde he podido desarrollar gran parte de mi carrera deportiva. Así que me contacté con la administración del parque para invitarlos a patrocinar el proyecto. Recibieron la invitación con entusiasmo, abriéndonos las puertas del parque, facilitándonos las instalaciones y otorgándonos los tickets de entrada para los asistentes.

    Foto: Carmen Wetzel. En un feliz dìa de entrenamiento en Yerba Loca.

    El lunes 06 de octubre se abrieron las inscripciones y ese mismo día se agotaron los cupos. Eso me motivo muchísimo. 

    Los días siguientes fueron de mucho trabajo para hacer que la experiencia fuera inolvidable para cada participante, pero lo más importante para mi era que cada asistente se quedara con algo en su memoria, algo que pudiera aplicar cada vez que saliera a la montaña, para si mismo o para compartir con otros. 


    Una vez que tenía el contacto de todos los inscritos armé un grupo de Whatsap para coordinar la actividad con ellos. Y una de las cosas más lindas del grupo fue que noté inmediatamente el cariño de cada uno y por sobre todo el compromiso, lo que se vio reflejado en la asistencia del día 19, llegaron todos y muy puntuales. 

    Para mí era super importante que fuera un grupo pequeño, primero para minimizar nuestro impacto, y por otro lado para poder conocer a cada uno de los participantes, sus experiencias de vida, sus motivaciones, que es lo que los conecta a este estilo de vida en las montañas y porque creyeron en este proyecto.

    Así comenzamos la primera parte de la jornada con un conversatorio, en el que pudimos conocernos todos y en donde salieron cosas muy lindas, historias de vida muy similares y otras muy opuestas, lo que permitió que se formara un grupo muy especial, diverso en edades, estilos, pero todos con la misma motivación, la de aprender y hacer comunidad.

    Foto: José Luis González.

    Luego pasamos a la capacitación de Planificación 3×3, No Deje Rastro, fichas medicas y entrega de kits. Esa hora se nos pasó volando. 

    Foto: José Luis González.
    Foto: José Luis González.
    Foto: José Luis González.
    Foto: José Luis González.

    Luego nos fuimos a correr al cerro. En el grupo habían corredores con mucha experiencia y otros que estaban introduciéndose en el deporte. Algunos más rápidos, otros más lentos, aun así nos mantuvimos todos juntos de principio a fin. Eso me demostró una vez más la calidad de personas que había en el grupo, confirmándome que la motivación de cada uno era aprender de otros y de hacer comunidad. 

    Foto: José Luis González.
    Foto: José Luis González.
    Foto: José Luis González.

    Llegamos a la cumbre y ahí tuvimos momentos muy especiales. Los asistentes concursaron por los premios de Garmin, hicimos preguntas de conocimiento y compitieron en una carrera simbólica de 100 metros verticales. 

    Foto: José Luis González.

    Nos reímos y nos emocionamos.

    Uno de los premios era un cupón de $100.000 de Garmin, y cuando tocaba concursar por el, se me ocurrió la idea de compartir la historia de Natalia Guiavelli, quien es Jefa de Guardaparques de Yerba Loca y que estaba ahí como asistente, a quien le pregunté si me permitía compartir su historia con el equipo. La Naty había sufrido hace pocas semanas el robo de su equipo de montaña desde su camioneta, incluido su InReach de Garmin. Así que una vez que compartí la historia propuse que diéramos ese cupón a la Natalia para que pudiera renovar su equipo. Todos apoyaron la propuesta con entusiasmo. Comprobando una vez más que estábamos haciendo comunidad. 

    Foto: José Luis González.
    Foto: José Luis González.
    Foto: José Luis González.

    Cerramos la cumbre con una foto de equipo y procedimos a descender. 

    Llegamos todos juntos, sanos y a salvo a Villa Paulina, unas palabras de cierre y despedida. 

    Yo estaba con el corazón lleno de felicidad ya que había salido todo bien y había cumplido con el propósito. 

    Quiero agradecer enormemente al fotógrafo Josè Luis González, un seguidor de Instagram que cuándo supo de SAFE TRAILS FUN TRAILS me escribió para ofrecerme ser el fotógrafo para esta actividad, solo por la buena onda. Todas las fotos pertenecen a él, y que como pueden ver, captaron la esencia del evento. 

    Agradecer a mi amigo Rafael Olavarria de NOLS Patagonia por regalarnos tarjetas de No Deje Rastro para cada participante.

    Agradecer especialmente a la Administración de Yerba Loca, a Nicolas Vigil, Natalia Guiavelli y Benjamin Astudillo por haber sido anfitriones de esta iniciativa. Gran parte de los participantes no había ido nunca al parque y sé que quedaron enamorados de este parque al igual que yo. Gracias al equipo de Outlife por el tremendo trabajo que hacen en este Santuario. Y también a la Municipalidad de Lo Barnechea por proteger este espacio tan importante para esta cuidad.

    Gracias a mis auspiciadores que no solo apoyaron mi idea sino que aportaron con hermosos regalos para los participantes. Especial agradecimiento a Benjamin CarvalloSerkan Devlen de Patagonia, a Andrea Hartung y Manuela Mayne de Garmin y a Fede Maiz de Carpas Tribu.

    Y finalmente gracias a cada uno de los miembros de la primera versión de SAFE TRAILS FUN TRAILS.

    Vicente Gonzalez
    Sebastián Pavez
    Ignacio Pedrals
    Juan Emilio Gatica
    Rodrigo Morales
    Bernardita Ramírez
    Osvaldo Bustos
    Marcelo Pino
    Felipe Sáez Valdés
    Cristian Barra
    Francisco Méndez
    Agustin Araneda
    Marcelo Morales
    Anja Struck
    Leonor Calvo
    Macarena Correa
    Natalia Guiavelli

    Foto: José González.
  • Safe Trails Fun Trails

    Safe Trails Fun Trails

    Una forma de retribuir a la naturaleza y a las comunidades, y ser un aporte en la solución ante la problemática de los accidentes en áreas naturales.

    Accidentes en áreas naturales

    Cuando existe una problemática, existen dos opciones: ser parte del problema o ser parte de la solución. Y si crees que existe una solución, entonces tomar acción es una responsabilidad. También puedes ignorar el problema, pero las sociedades han logrado prevalecer cuando sus individuos actúan con empatía y generosidad incluso cuando creen que el problema les es ajeno.

    Safe Trails Fun Trails nace como un deber, ya que creo firmemente que quienes nos dedicamos a cualquier actividad en la naturaleza tenemos la misión no solo de proteger y defender el medio ambiente, sino que, además, tenemos una responsabilidad más amplia, que implica en cierto modo dar algo a cambio y con ello aportar a la naturaleza y a las comunidades.

    Bajo esa perspectiva es que como deportista, guía y defensor ambiental tengo no solo el deber de practicar con el ejemplo, sino que además me siento con la responsabilidad de aportar en la difusión de buenas prácticas en áreas naturales a través de la educación deportiva y ambiental.

    Así como pueden ser múltiples las causas de un problema, también puede haber múltiples soluciones. Sin embargo, creo que no hay herramienta más poderosa que la información, esa que obtenemos de otros, de nuestras experiencias y que luego traspasamos a los demás, a veces simplemente actuando con el ejemplo. Aunque no siempre es fácil dar el ejemplo, especialmente haciendo lo que hago, saliendo constantemente de la seguridad y de mi zona de confort. Pero ha sido así cómo he podido conocerme mejor, exponiéndome para conocer la naturaleza y sus potenciales riesgos.

    No se trata de asumir la responsabilidad por los accidentes de terceros, se trata de tomar acción en la búsqueda de soluciones al problema.

    Así es como nace Safe Trails Fun Trails, como una forma de dar algo a cambio y con ello aportar en la solución de la problemática de los accidentes en la montaña.

    Pronto será el lanzamiento de esta iniciativa con una actividad especial, un conversatorio y una clínica de trail running.


    El excursionismo es una de las prácticas deportivas más comunes y con mayor auge entre los chilenos. Lamentablemente, de la mano con el incremento en esta práctica deportiva, también ha habido un aumento en los accidentes.

    Con el transcurso del tiempo, y a pesar de los intentos por parte de las autoridades de educar y prevenir las conductas arriesgadas de quienes deciden realizar este tipo de actividad deportiva, los accidentes siguieron ocurriendo. De hecho, “solo en la región metropolitana, se realizaron más de 70 operativos en montaña el año 2022, y el 2023, 58 operativos”.

    En este sentido, existe una relación causal directa entre gran parte de los accidentes que se van produciendo y la imprudencia de los excursionistas que se exponen a situaciones de riesgo.

    La gravedad de la situación recae en que cada rescate implica la movilización de un gran número de recursos y de personal capacitado.

    En el año 2016, CONAF señalaba que las multas dispuestas por la ordenanza municipal no alcanzaban a cubrir la verdadera envergadura de los hechos. En palabras de Héctor Correa, director regional de la Corporación Nacional Forestal “(la multa) es casi simbólica y no cubre en nada el esfuerzo que se tiene que hacer para traer a estas personas sanas y salvas hasta la administración» […] «el costo mínimo de rescatar a una persona en La Campana es de entre $3.500.000 y $5.000.000».

    Ahora bien, la situación no es desconocida a nivel comparado, ya que en países como España las autoridades han determinado que los excursionistas negligentes que “deban de ser rescatados por los equipos de salvamento de la Generalitat deberán abonar el coste de los trabajos”.

    En este sentido, el presente proyecto de ley en Chile busca regular criterios de imprudencia temeraria en la que podrían incurrir excursionistas que posteriormente deban ser buscados o rescatados por equipos de rescate, y fijar una multa, que sería consecuencia de este actuar imprudente, y la forma de hacerla efectiva por parte de los Juzgados de Policía Local.


    PROYECTO DE LEY

    “Artículo 1°. Objeto. La presente ley tiene por objeto sancionar la imprudencia temeraria en el caso en que un excursionista o senderista o grupos de ellos, que requieran ser auxiliados por equipos de rescate. La imprudencia temeraria incluye conductas tales como no vestir la ropa o el calzado adecuado, no portar equipamiento de protección, hidratación o alimentación, no planificar la ruta, en caso de ser un visitante no hacerlo con un guía local autorizado, no dar cumplimiento a los protocolos de registro correspondientes, no considerar el pronóstico del clima, realizarlo de noche o condiciones de baja visibilidad sin contar con el equipamiento correspondiente, no llevar el equipo de protección adecuado, o realizar las actividades bajo la influencia del alcohol o drogas.

    “Artículo 2°. Cuando se realice una actividad de excursión dentro de un área protegida, pública o privada, se deberá dar aviso a la administración o persona responsable o, en su defecto, a Carabineros de Chile o Municipalidad del lugar a visitar.

    “Artículo 3°. Es obligación de quien realiza una actividad de excursión o senderismo:

    a. Realizar la actividad por senderos autorizados. b. Contar con el vestuario y equipamiento adecuados, entre los que no podrá faltar un equipo de primeros auxilios que contenga elementos como linterna, equipo de comunicación, agua y alimentación.

    “Artículo 4°.- En caso de que Carabineros, Socorro Andino, Bomberos u otra entidad deban realizar labores de búsqueda, rescate o salvamento para auxiliar a personas que hayan incumplido lo dispuesto en el artículo 3 de la presente ley, dichas entidades deberán presentar la denuncia correspondiente ante el Juzgado de Policía Local de la comuna donde ocurrieron los hechos o desde donde se coordinaron las operaciones de búsqueda, rescate o salvamento. El Juzgado podrá imponer sanciones en forma de multas que oscilarán entre 1 y 10 Unidades Tributarias Mensuales.

    “Artículo 5°.- Tratándose de menores de edad, si se estableciera responsabilidad de ellos en cualquiera de las situaciones contempladas en la presente ley, los padres o adultos que los tuvieren a su cargo deberán pagar la multa que al efecto se imponga”.

    Fuente:

    https://direcciondeestudios.pjud.cl/corte-suprema-informo-proyecto-de-ley-que-sanciona-la-imprudencia-de-excursionistas-que-generen-operaciones-de-rescate-boletin-n-17347-22

    https://camara.cl/verDOC.aspx?prmID=81975&prmTipo=FICHAPARLAMENTARIA&prmFICHATIPO=DIP&prmLOCAL=0

    Trail name «Vertical KM»_RUFA_Santiago_Chile 2024. Fotografía: Rodrigo Manns

    Trail name «Vertical KM»_RUFA_Santiago_Chile 2024. Fotografía: Rodrigo Manns

  • Altar Falso 4.549 metros

    Altar Falso 4.549 metros

    Altar Falso 4.549 metros.
    Canalón Suroeste
    Solitario en invernal por el día
    .

    Esta montaña estuvo en mi lista de deseos durante muchos años. Pasé decenas de veces corriendo a sus pies, y la observaba con admiración y respeto. Sabia que para escalarla necesitaba más experiencia y habilidades, especialmente si quería escalarla a mi estilo.

    Como me es costumbre comencé sumergiéndome en la historia de la montaña, fue así que hace muchos años atrás cuando trabajaba en una tienda patagonia, leía por primera vez de esta montaña en el sitio web de Chileclimbers, el titulo del articulo decía JIMMY MORA: PARED SUR DEL CERRO FALSO ALTAR ¡¡EN SOLO!! con ese titulo quedé enganchado. Yo conocía al Jimmy porque en esos años él era embajador de Patagonia Chile.
    Quizás como muchos, he admirado a atletas y escaladores extranjeros, esos que aparecen en las películas de escalada y que han llevado la escalada a otros niveles, pero antes que a ellos, yo siempre he sentido una profunda admiración por los escaladores y atletas chilenos, porque muchos de ellos han empujado los limites a punta de pan y agua, y de humildes apoyos. Por eso sentía una profunda admiración por el Jimmy, como por tantos otros, como el Nico Gutierrez, el Seba Rojas, los Señoret, el Andres Zegers.

    Habiendo acumulado experiencia y habilidades técnicas, junto con la capacidad de moverme rápido y aguantar largas jornadas en la montaña gracias a llevar muchos años dedicándome al mountain running, me sentía más listo para darle el pegue a esta montaña. Pero lo haría a mi modo, es decir, en solitario, in one push, sin campamentos, desde el auto, hasta la cumbre y de vuelta al auto, ademàs esta vez lo haría en invierno. A pesar de no ser una montaña especialmente técnica (a excepción de su cara sur), la montaña tiene fama de ser super intrincada, por eso que durante su historia tiene muchos intentos de ascensos y pocas cumbres exitosas. Ninguna de sus caras es fácil, incluso la ruta normal es super extensa. Yo no quería ir por la normal, inspirado por el Jimmy quería intentar algo parecido, pero aun no estoy a ese nivel así que buscando otra alternativa encontré la variante Canalón Sur Oeste abierta por Fernando Fainberg y Elvis Acevedo en 2007, y que según las investigaciones que hice, no tenia repeticiones. Ellos la escalaron en Septiembre, en un total de 4 días, desde Villa Paulina, cumbre, Villa Paulina. Según algunas fotos y su relato la ruta parecía hermosa, desafiante y compleja. Así que me motivaron. Elegí la primera semana de julio para darle el pegue, el pronostico parecía estable, cielo despejado y un frio ideal para mantener el hielo y la nieve firme.

    Partí caminando desde el estacionamiento de Villa Paulina el lunes 06 de julio a las 2 am (es decir domingo en la noche), en una noche fría pero sin viento.

    Foto referencia de uno de los tantos entrenamientos. Foto de la partner Carmen Wetzel.

    Solo llegar a pie de vía requería una caminata de 15 kilómetros con 1.500 metros de desnivel, nada que no hubiera hecho antes, pero ahora seria caminando por nieve profunda, así que sabia que iba a ser una larga lucha. Había calculado unas 5 horas para llegar hasta Piedra Carvajal, que es desde donde parte la escalada, de manera tal de estar a pie de vía a las 7 de la mañana con el sol saliendo para iluminar. Mis cálculos fueron precisos, llegue a eso de las 7:10, me senté a mirar la pared mientras prendía la cocinilla para prepararme un café. No tenia un track para hacer el ascenso propiamente tal, solo sabia que era una de las canaletas de la pared SurOeste que dan hacia Piedra Carvajal. Así que a punta de instinto me monte en la ladera y comencé metiendo crampones y piolet cuesta arriba. La calidad de la nieve estaba exquisita, a esa hora estaba firme y compacta, por lo que pude moverme con fluidez a pesar de no saber si estaba exactamente en el canalón correcto. Todo el ascenso transcurría entre laderas con buena nieve, canalones cerrados con hielo, grandes paredes de roca y ricas chimeneas mixtas, pura diversión con pasos de hasta V grado, los que pude pasar sin asegurarme.

    Así eran todos los pasos de escalada.

    No había ni el mas mínimo lugar plano para sentarse o en otro caso para un vivac, siempre vertical. Cada vez que creía llegar a la cumbre, aparecía frente a mi otra cresta de rocas del tipo falsa cumbre, muy agotador, pero lo estaba pasando genial, especialmente porque me sentía en un flow exquisito, sin dudar ni en lo más mínimo de mis decisiones, ademàs el pronostico del tiempo había acertado, estaba soleado, sin viento, aunque frio pero como estuve en constante movimiento, nunca sentí frio.

    Cuando la escalada comenzaba a ponerse más técnica y entretenida.

    Todo fluía bien, pero no quería descender de noche por la pared, por lo que me esforcé en moverme rápido de manera tal de hacer cumbre y descender antes de que se escondiera el sol. Pero no lo logré. Cuando eran cerca de las 6 de la tarde, me detuve para analizar la situación y decidir con madurez.
    Tenia 3 opciones:
    Opción 1: Abandonaba el intento a la cumbre y comenzaba a descender.
    Opción 2: Armaba un vivac para pasar la noche y hacer cumbre al día siguiente apenas saliera el sol.
    Opción 3: Seguía escalando a punta de linterna frontal y coraje.

    Abandonar casi no era opción, no solo porque no quería desertar, sino que ademas eso iba a requerir hacer múltiples rapeles por la cara sur oeste, por donde había subido, en una ruta que no tenia ningún anclaje instalado por lo que tendría que abandonar material, stoppers, cordines, etc y eso no necesariamente me gusta, no por perder material, sino porque quería evitar dejar rastros en la montaña. Así que opción 1 descartada. Opción 2 que era improvisar un vivac, a pesar de que no voy preparado para hacer un campamento, siempre llevo conmigo una manta de supervivencia y un saco ultraligero de patagonia, así con eso ante cualquier emergencia puedo improvisar un vivac y pasar la noche. No me gustaba mucho la idea porque en primer lugar no había ningún sitio apto para tirarme y tendría que aguantar 12 horas en esas condiciones, de 7 pm a 7 am del día siguiente cuando saliera el sol para iluminar el descenso. Sin embargo parecía ser la opción más inteligente y segura, así que armé un pequeño espacio entre la nieve y la roca y me dispuse a intentar dormir. No aguante ni 15 minutos, entre la incomodidad, el peligro latente a moverme en la noche y caer, el frio y en mi cabeza solo pensaba en las 12 horas en esa posición. Me levante, volví a meter todo en la mochila y me lance a la cumbre. Fue uno de los atardeceres más hermosos que he podido vivir en una cumbre, un atardecer anaranjado, mágico y cálido. Había hecho cumbre entre la inmensidad de montañas y glaciares, en solitario y en invierno. Estaba completamente agotado pero la sensación del logro y a la vez mi diminuta existencia en esa inmensidad me dieron un golpe de humildad y un hermoso regocijo de felicidad plena. Un par de fotos, un video y comenzar el descenso.

    Foto cumbrera con el gran Altar de fondo.
    Foto cumbrera con el gran Altar de fondo.

    El descenso sería o por la ruta normal que es descender hacia el Este o por la cara norte. Desde la cumbre el descenso por la ruta normal no se veía para nada fácil, pero ese no era el problema, el problema es que le añadía varios kilómetros más al descenso y la verdad no quería meterle más, bastaba con los 18 kilómetros de caminata que me esperaban una vez que saliera de la pared, para llegar a Villa Paulina. Así que decidí comenzar a asomarme por la cara norte, que es también por donde habían descendido Fainberg y Acevedo en 2007. En su relato describían el descenso como una especie de juego de suerte, donde la idea era darle a alguna canaleta que cayera continua hasta el final del valle, de manera tal de no encontrarse con alguna pared que tener que rapelar. Eso era un juego entretenido, pero desgastante porque devolverse no era opción.

    Ya se había hecho de noche, tenìa 2 baterías full cargadas para la linterna frontal, así que estaba tranquilo, sin embargo, no sé si por el frio o que pero comenzaron a fallar, funcionaban un rato, se apagaban y se volvían a prender. Sentí cierta preocupación, fue ahí cuando me di cuenta que una luna gigante me iluminaba absolutamente todo. Sonreí y comencé a disfrutar. Flui por varios destrepes mixtos sin problemas, hasta que me tope con un paredón que no podía desescalar, me puse a buscar a la derecha, a la izquierda, nada, subí un poco para buscar otra alternativa, pero estaba super cansado y la subida contemplaba un acarreo imposible, seguí buscando a luz de luna y de repente ! encontré un anclaje con 2 clavos ! simplemente no lo podía creer. Parecían viejos y estaban unidos por una anilla completamente congelada. Revise en que condiciones estaban, le metí carga y simplemente confíe en ellos. A pura luz de luna instale la cuerda y descendí sin problemas, los crampones al resbalar por la roca producían chispas que parecían estrellas fugaces en la noche, en ese momento me di cuenta que al parecer estaba teniendo las primeras alucinaciones. Me sacudí la cabeza y mire el reloj, ahí me di cuenta que ya llevaba casi 20 horas de actividad, por lo tanto llevaba más de 26 horas despierto, por lo que el cansancio y la deshidratación estaban haciendo lo suyo en mi mente produciéndome alucinaciones. Sin embargo de una otra forma lo estaba disfrutando, seguí ejecutando con precisión y llegue al fin del rapel, saquè la cuerda y seguí destrepando hasta el fondo del valle. Había llegado por fin al pie de la ladera y ya estaba en el valle sobre el glaciar, ahora solo se trataba de caminar con tranquilidad.

    La luna estaba a mis espaldas y recuerdo que cada 10 pasos giraba la mirada hacia ella con una sonrisa a modo de agradecimiento. Por mientras las alucinaciones se hicieron más evidentes, las sombras que se producían entre las rocas y el hielo aparecían en mi mente como seres vivos que curiosos observaban a este mono caminando como zombie. Me reía de cansancio. Salí del valle justo frente al Mirador del Glaciar La Paloma, me senté en una roca y saque la cocinilla para derretir agua para hidratarme, seria la ultima parada, de ahí en delante era mandarle fuerte y derecho hasta Villa Paulina. Ese descenso se me hizo eterno, me caía de sueño, así que decidí que cada cierto rato me metería en algún boulder, sacaría el saco de dormir y me pondría unas micro siestas. Así lo hice, no recuerdo cuántas veces, pero por los tiempos que hice en el total del descenso calcule que debo haber hecho unas 4 micro siestas de 10 minutos cada una. Llegué a Villa Paulina, agotado fisicamente pero con una felicidad que es realmente imposible de explicar. Lo había logrado, estaba sano y salvo.
    Partí en Villa Paulina el lunes a las 2 am y regresé el martes a las 4 am. 26 horas de actividad. 32 horas sin dormir.

    Quiero agradecer al Jimmy Mora por su visión y por haber sembrado la motivación y a Fernando Fainberg y Elvis Acevedo por tan linda ruta abierta.

    Gracias a mi Anja por apoyar y aguantar mis escapadas, al lindo equipo de guardaparques de Yerba Loca y las familias Garmin, La Sportiva, Patagonia, Sea To Summit, Carpas Tribu.

    El equipamiento.
    El saco patagonia a la izquierda que me salvo en las micro siestas.

    Amaneciendo en Piedra Carvajal.

    Eternos canalones verticales. Al fondo Cerro los Piches de 4.232 metros.

    Último acarreo a la cumbre.

    Mágico atardecer en la cumbre.

    Uno de los tantos trails en el valle soñando con escalar el Altar Falso.
    Foto tomada por el partner Nico Gantz.

    Mapa general del recorrido comenzando y terminando en Villa Paulina.

    Mapa de la ruta de ascenso Canalon Suroeste y descenso por la cara norte.